Todas las recesiones del pasado y las recesiones de la memoria moderna han provocado la revolución de los titulares de la industria tecnológica y el ascenso de nuevas potencias. La brutal recesión de principios de los 80 dio lugar a la era de los ordenadores personales. En la recesión más suave de principios de los 90, el gobierno federal cedió Internet al sector privado y sentó las bases para el boom de las puntocom que dio origen a Amazon, mientras Microsoft se hacía con la victoria de Windows sobre Apple.